Esta me parece muy interesante.solipsista escribió:Otra falacia:
Falacia Post hoc, ergo propter hoc
Premisa (errónea): Si el evento B se observa a continuación del evento A, entonces seguramente A es la causa de B.
Ejemplo:
Premisa definitoria: Si el evento B se observa a continuación del evento A, entonces seguramente A es la causa de B.
Premisa: Siempre que tiembla me pongo a rezar y tiempo después el temblor se detiene.
Conclusión: Los rezos detienen los temblores.
NOTA: La falacia Post hoc, ergo propter hoc sólo es aplicable en los casos en que evidentemente no haya relación entre los eventos. Sin embargo, existen casos en que en los eventos que van uno a continuación del otro sí hay una relación de causa-efecto; en estos casos no sería aplicable esta falacia.
Hace poco, hablando de la influencia (o falta de ella) de los pensamientos en la vida concreta mencionaste una creencia típica del "new age" que circula por ahí que le llaman "el poder de la intención".
Me he cansado de escuchar este tipo de falacias en razonamientos como el siguiente: "ya sé, fue que me levanté de mal humor, por eso me asaltaron hoy en la calle"; o "fue gracias a que me levanté con pensamientos positivos que hoy cerré un negocio inmobiliario"*.
Un ejemplo grotesco que me gusta es "se observa que el gallo canta antes de salir el sol, por lo tanto el canto del gallo es la causa de que salga el sol".
Por su puesto (como bien aclaras) hay eventos que suceden antes que sí son causa, pero debe verificarse la relación causal.
---
* El ejemplo fue para mostrar el pensamiento mágico que albergan muchas personas al creer que el poder de la mente puede modificar, intervenir o determinar efectos en el mundo concreto de manera irracional.
Habría algunos ejemplos en donde podría haber un grado de influencia, o ser una variable más. Un buen vendedor (a diferencia de uno torpe y mal humorado) a través de su lenguaje persuasivo, seductor y convincente (el lenguaje es la exteriorización de determinado tipo de pensamientos), podría llegar a ejercer una influencia en la decisión del comprador.
Pero el pensamiento positivo no podría influir en el tiempo metereológico para que se realice la "fiesta" o el "partido" de acuerdo a los personales deseos, como algunos tontamente creen.